¿Pero qué es eso? me preguntan mis amigos. Una convención de desarrolladores y programadores informáticos. ¿Y qué haces ahí? Pues nada, otro charco más en el que me ha dado por chapotear.
Fui porque cuando compré las entradas (que me parecieron caras) sabía que no iba a veranear, no iba a poder ir a Málaga, no me iban a dar el alta, ni yo iba a estar para muchas cosas hasta dentro de unos meses. Y pensé: “regalito para ti, a ver qué se cuece”.
PRIMER DÍA:
Como soy una agonías, llegué una hora y media antes de lo que debería.
Las personas del mostrador me dieron la bienvenida como si me hubiera perdido y me hubieran encontrado, por fin. Antonio, que lleva la comunicación, se entretuvo hablando conmigo, y respondiéndome a todas las preguntas (siempre demasiadas) que se me pasaban por la cabeza. Un fantástico RRPP y CM.
“¿De qué color quieres la cinta de tu identificación?”
“No sé, ¿qué colores hay?”
“Rojo si quieres que te hablen, negro si no estás abierto”.
“Siempre abierta, Antonio”.
Olvidó decirme que había un collar hawaiano para los más abiertos, que se dejan interumpir.
Una mochila, una camiseta, tres pares de calcetines, un neceser de IKEA, cuaderno y boli, un juego de cartas (que luego explicó David) y mil cosas más, es lo que contiene el kit de bienvenida.
La gente estaba en los talleres (que pensé que eran demasiado para una primera vez pero igual el año que viene me cuelo en alguno). Me senté a ver mis regalitos. Se acercó David Bonilla a saludarme (no nos conocíamos, pero él es así de detallista) y, la verdad es que, sabiendo que es el alma de todo ello y el trabajazo que requiere organizarlo, me sorprendió y me hizo mucha ilusión. El espacio de La Nave es inmenso, así que me paseé por los stands (¡qué buenos slogans! “The unconventional, delivered”). El último era de libros y merchandising y lo llevaban dos niños: los hijos de David. Hablé con ellos, con su madre Marisa, con su mujer Super Candela, se acercó Yeray, me insistieron en que David me dedicara su libro (¡con la vergüenza que me dan esas cosas!) y de repente, se fue el frío y me sentí una más.
Cuando acabaron los talleres y empezó a llegar la gente que venía al CROSSOVER DEFINITIVO (podcast conjunto Heavy Mental + Mixx.io) empecé a encontrarme gente conocida de X (antes llamado Tuiter), del grupo de Heavy Mental de Telegram, de la comunidad CPS de Recuenco. Total, que para cuando empezó el podcast en directo yo ya estaba dispuesta a hacer el ridículo contestando las preguntas de Miki (el showman de la #TRG23) sin ningún pudor.
“Mañana es el día grande”, me dijo Marisa, la madre de David Bonilla.
“Tengo médico y no llegaré a primera hora”
“Pues vente del médico directamente, en cuanto puedas”.
Y así lo hice.